Podemos definir el pensamiento crítico como la capacidad que tenemos los seres humanos de analizar, evaluar y clasificar la información que nos rodea. Esto pareciera una acción sencilla pero si nos cuestionamos esta acción como tal podemos llevarnos grandes sorpresas en la reflexión.
En la actualidad el ser humano cuenta con un recurso tan valioso como lo es la tecnología que sin dudar ha transformado nuestra forma de vivir pero también la forma en la que aprendemos, comprendemos y pensamos, hoy la información está a un clic, basta con escribir en el buscador lo que deseas y este te responderá. ¡Increíble!
Pero… ¿Leemos hasta el final la información que encontramos? ¿Cuántos sitios web buscamos para enriquecer nuestra búsqueda? ¿Quién es el autor del sitio? ¿Cuándo fue la última vez que se actualizó la información?
Y es cuando interfieren otros factores en los que podemos excusarnos, ¡no tengo tiempo!
¡No me gusta leer! ¡ufff demasiada info! ¡Esto parece interesante (copy-paste)!
Detenernos a pensar, analizar, cuestionar e idear puede llegar a resultar aburrido y hasta cansado pero es imprescindible en nuestra vida porque nos permite respetar y validar diferentes pensamientos e ideas, valorar el conocimiento, transmitir valores, ser capaces de tomar decisiones, ser autónomos, cuestionar y refutar con fundamentos.
Por eso la próxima vez anímate a opinar, a debatir, analizar, a criticar constructivamente, confía en tu conocimiento y en tus ideas, todos somos capaces de hacerlo pero muchas veces no estamos seguros del conocimiento que poseemos.
Te comparto algunas recomendaciones para desarrollar el pensamiento crítico:
Practica lectura comprensiva
Resuelve adivinanzas
Realiza actividades de secuencia
Plantea situaciones de la vida cotidiana
Focaliza un tiempo para pensar y reflexionar
Promueve el conocimiento y la curiosidad
Aprende a dudar
Genera preguntas
Expresa lo que sabes
Recuerda:
“La lectura nos abre las puertas del mundo que te atrevas a imaginar”
Anónimo